Imagen elaborada por IPS Cuba a partir de obras de la artista de la plástica Ileana Sánchez |
LA HABANA (IPS) - La necesidad de reconocer y tipificar el femicidio, la urgencia de contar con una nueva ley específica de violencia y la responsabilidad de los medios de prensa a la hora de comunicar centran la polémica pública que rodea la primera muerte de una mujer por razones de género registrada en Cuba en 2023.
“El asesinato de una mujer a manos de un hombre por machismo, misoginia, motivos de género diversos debe ser definido como Femicidio y sancionado con penas máximas”, aseguró en su muro de Facebook la profesora universitaria Magela Romero, del grupo asesor sobre violencia de género de la Federación de Mujeres Cubanas (FMC).
Romero fue una de las cientos de personas que reaccionaron ante una publicación periodística que calificó la muerte de una mujer a manos de su expareja como crimen pasional. “No hay muerte por Amor ni Crimen Pasional”, añadió la experta al recordar que tal calificativo tiene su origen en la “naturalización social” de la violencia de género.
“La muerte de mujeres a mano de hombres violentos, generalmente parejas y exparejas, que se creen con la potestad de poseerlas y cuando ellas dicen NO las matan como castigo y corrección, son de carácter sistémico y tienen su raíz en el profundo patriarcado estructural”, comentó la periodista Claudia Rafaela Ortiz integrante del colectivo feminista Cimarronas.
Periodistas de varias provincias como Lisandra Gómez insistieron en la responsabilidad social de los medios públicos y la urgencia de garantizar un abordaje adecuado de temas sensibles como la violencia de género.
Según el periódico Venceremos, de la provincia oriental de Guantánamo, el 5 de enero un policía de tránsito disparó contra su expareja, la doctora Damaris Rodríguez Domínguez, y el paramédico Luis Miguel Bartoló Tamayo, quien conducía una ambulancia procedente del municipio guantanamero de El Salvador.
Rodríguez, especialista en Medicina General Integral y diplomante de Terapia Intensiva en el Policlínico Francisco Castro Ceruto, murió cuando recibía atención médica, en tanto su acompañante llegó al hospital en estado crítico, pero se encuentra en proceso de recuperación de la herida recibida por arma de fuego. Según el periódico, “el perpetrador se entregó a las fuerzas del orden sin oponer resistencia”.
Sin estadísticas públicas sobre femicidios, en un contexto donde los medios tradicionales de comunicación no suelen darle seguimiento a tales hechos, este caso aparece como el primero de su tipo en 2023, con el agravante de involucrar a un agente de la fuerza motorizada de la Dirección Provincial de Tránsito.
De acuerdo con el Observatorio de Género de la plataforma feminista independiente cubana Alas Tensas, Cuba cerró 2022 con 34 muertes de mujeres por razón de género confirmadas, dos menos que las contabilizadas en 2021. En dos de estos casos, fueron menores de edad. “La cifra pudiera ser superior, pero no existe un registro oficial”, consideró la cineasta Marilyn Solaya, quien agregó que “la visibilidad de los registros y estadísticas son el primer ejercicio de reparación que todos podemos ofrecer a las víctimas de violencia de género y a sus familiares”.