Para el reconocimiento de las libertades que hoy las podemos ejercer, las sociedades han tenido que pasar por períodos matizados con la contribución de pensadores y filósofos, quienes a través de sus teorías han desvirtuado dogmas que aquejaban a la sociedad, como la libertad de expresión, base de una sociedad tolerante.
Se aproxima la fecha en la que debemos elegir a las autoridades seccionales que regirán los destinos de la administración pública de las provincias y cantones de nuestro país, por lo que es útil reflexionar sobre la necesidad de ejercer nuestros derechos con responsabilidad, debemos contar con información de calidad para que nuestro voto no se limite al ejercicio de un derecho en el día programado, sino que le anteceda un proceso que permita tener la mejor información de calidad, para que nuestra elección sea la materialización de tiempos de reflexión y análisis, en el que hemos evaluado las mejores propuestas, y reconozcamos a los candidatos que han realizado programas de acción pertinentes y alcanzables frente a los principales problemas que como sociedad enfrentamos en la actualidad.
Para alcanzar el reconocimiento de las libertades que hoy las podemos ejercer, las sociedades han tenido que evolucionar y pasar por diferentes períodos, matizados con la contribución de pensadores y filósofos, quienes a través de sus teorías han desvirtuado dogmas que aquejaban a la sociedad, como es el caso de la libertad de expresión, base para la construcción de una sociedad tolerante, en la que prime el respeto al criterio ajeno y el sometimiento al ejercicio de la razón.
La protección de la libertad entendida en su concepto general, surge como respuesta a situaciones concretas por las cuales ha pasado la humanidad y la convulsionaba, el derecho llegó para servir como un vínculo racional, que canalizó las necesidades de los individuos, otorgando soluciones a través de instrumentos jurídicos, los mismos que posteriormente fueron usados para la protección y garantía de otros derechos, como fue el caso de la libertad de expresión, que nos permite manifestar y comunicar sin trabas el propio pensamiento, y que tiene estrecha vinculación con nuestra dignidad, por eso, importantes juristas como Dworkin, defienden esta corriente: “el derecho a la libertad de expresión deriva de la idea de la dignidad de la persona humana y de su derecho a un trato que no desmerezca de esa dignidad.
Un hombre a quien se le impide o dificulta la comunicación libre es tratado indignamente y vejado en su auténtica condición como ser comunicativo y locuaz, condenándole al aislamiento social y al empobrecimiento espiritual”.
El bien jurídico protegido, es la defensa ante cualquier tipo de interferencia, para garantizar así la libre creación y posterior difusión de ideas, aseguramos de esta manera una sociedad democrática donde prime una opinión pública libre; la estructura jurídica se encamina a la protección de la expresión y difusión de las ideas, pensamientos y opiniones de los individuos a través de cualquier medio. En tiempo de elecciones, es una necesidad de los electores estar bien informados respecto de los candidatos a quienes van a elegir para que los representen, con sus correspondientes proyectos y propuestas. En esta esfera, el rol que deben cumplir los medios de comunicación es preponderante en su tarea de transmitir la información a los ciudadanos, con alta dosis democrática de pluralismo e independencia, a fin de que todos tengan la oportunidad de comunicarse y difundir sus planes de trabajo, y la ciudadanía, de conocer y poder tomar una decisión que valore la responsabilidad con la que se conoce las principales problemáticas que enfrentamos al momento y cómo se propone solucionarlas.
El uso de las Tecnologías de la Información y Comunicación sin duda ha servido para expandir y potenciar nuestros derechos, la Red constituye una fuente de apoyo a la democracia del siglo XXI, pone en manos de los ciudadanos la información generada minuto a minuto, para que la utilicen, difundan y valoren; tenemos entonces un elector informado y un usuario de servicios en constante diálogo con todos los candidatos, se eliminan barreras, hay una participación democrática responsable, otorga una mayor transparencia y eficiencia a la actividad pública y política, en definitiva potenciamos el ejercicio de la libertad de expresión y nuestro derecho a elegir con conocimiento y decisión que tomamos la mejor opción; este proceso dinámico, en el que las tendencias hacen de las redes sociales los mejores espacios para comunicar, nuestra atención la debemos dirigir a lo importante.