Pintura de Ilya Repin, representa al Zar Iván El Terrible con el cuerpo de su hijo, al que acaba de asesinar de un bastonazo en 1581. Está en la Galería Tretiakov, de Moscú. Algo semeja a la realidad actual, con Putín y la invasión rusa a Ucania, antigua parte del imperio soviético.