La vacunación contra el Covid 19 se ha acelerado en el Ecuador a partir de la última semana de mayo, luego de la asunción del gobierno del presidente Guillermo Lasso. Pero los contagios no se frenan y la epidemia mantiene el temor de las familias.

Según la oferta gubernamental, en sus primeros cien días de gestión, nueve millones de ecuatorianos serían inmunizados. Pero la demora en la compra del medicamento, podría impedir que se llegue a esa meta.

Al comenzar la segunda semana de junio, el rebrote del virus era notorio en el país, al parecer como consecuencia de que se aflojaran las restricciones de aislamiento con motivo del día de la madre, temiéndose que una situación similar se produzca en las próximas semanas, por el día del padre. Los sectores productivos insisten en la normalización de todas las actividades, para no ver disminuidos sus ingresos comerciales.

El trabajo a distancia, utilizando lo sistemas informáticos, también va descartándose gradualmente en los sectores público y privado, temiéndose que esto repercutiera en mayores contagios a futuro inmediato. También se ha abierto posibilidades para que los planteles educativos volvieran a abrir su puertas para la asistencia de los alumnos: otro riesgo de contaminación dela enfermedad.

Desde que empezó la pandemia global a comienzos de 2020, más de tres millones de personas han fallecido por esta causa en el mundo. En los países desarrollados la vacunación masiva ha controlado el crecimiento de la enfermedad y en varios de ellos se empieza a descartar el uso de las mascarillas. De eso están muy distantes los países en vías de desarrollo y especialmente el Ecuador, ya con más de veinte mil muertos por esta causa.