Faltan diez meses para conmemorar el bicentenario del histórico 3 de noviembre. Una Junta de Notables, presidida por el Alcalde Pedro Palacios, organiza los actos de recordación y homenaje, similar a como ocurrió hace un siglo en Cuenca
El bicentenario será gran preocupación municipal en 2020, de las instituciones públicas y privadas, de entidades culturales y educativas de Cuenca, pues trátase de una fecha emblemática que marcaría hitos en la vida de los cuencanos a los que tocará en suerte vivir el acontecimiento.
Hace un siglo, con más de tres años de anticipación al primer centenario, empezaron los preparativos para su celebración, a cargo de una Junta integrada por la Municipalidad en julio de 1917, asignando al Gobernador del Azuay, Alfonso Ordóñez Mata, la presidencia de la entidad.
Documentos de la época revelan el entusiasmo por el centenario, promoviendo iniciativas que dejaran huellas seculares. Bien vale, cuando corre la cuenta regresiva del segundo centenario, revisar algo de lo que se promovió, se hizo o no se hizo por los cien años. El aterrizaje del primer avión en Cuenca, fue lo más notable y el tema se abordó en la edición anterior.
El 23 de septiembre de 1918 el Presidente municipal Octavio Díaz, pidió al Presidente Baquerizo Moreno que se erigiera el monumento a Abdón Calderón en la plaza central de la ciudad, “como reconocimiento del noble sacrificio que hizo este joven cuencano, por la libertad ecuatoriana”. El propósito era inaugurarlo el 3 de noviembre de 1920.
También pidió a la legislatura, que en 1899 había decretado la erección del monumento, sin que la resolución se cumpliera. Fue el proyecto cívico más importante del centenario, que no se realizó. El monumento al Héroe Niño se inauguró en 1930, una década después, con aportes municipales y de entidades locales.
El ferrocarril era una sentida aspiración de entonces. El 25 de julio de 1917 la Municipalidad aprobó una ordenanza para delegar a los doctores José Julio Matovelle y Gonzalo S. Córdova, para que gestionaran del gobierno la construcción del ferrocarril Puerto Bolívar-Cuenca. También aprobó una partida extraordinria para promover la obra.
Baquerizo Moreno consiguió un empréstito de 500 mil sucres para el ferrocarril y la Municipalidad, en gratitud, expidió el 9 de abril de 1919 una ordenanza para colocar su retrato en el salón de sesiones. El Presidente respondió “vivamente reconocido, tanto más, cuanto aquel Acuerdo será una de las páginas más honrosas de mi vida como Presidente o ciudadano…”. Su retrato se colocó el 3 de noviembre de 1919 a los 199 años de independencia. El Presidente Municipal, Octavio Díaz, dijo entonces: “A todos nos consta el decidido empeño de este distinguido magistrado porque Cuenca realice su legítima aspiración, de unirse con el Norte y Occidente de la República, por medio de una línea férrea”.
Pero el ferrocarril sólo llegaría a Cuenca en 1965, cuarenta y seis años después, con un precario e intermitente servicio que se extinguió en marzo de 1993, cuando el desatre de La Josefina afectó las rieles y dio oportunidad de abolirlo para siempre.
El adecentamiento de la plaza San Francico, entonces conocida como Ramírez Dávalos, fue otra preocupación municipal con miras al centenario. El 12 de abril de 1919 se contrató con Agustín Montesinos la construcción de barracas para el expendio de los productos al público. El contratista se comprometía a usufructuar del arriendo de los locales por ocho años, dejándolos luego a disposición municipal. El tema fue polémico –como ocurriría en los actuales tiempos-, pues hubo quienes consideraban inapropiado alterar el espacio tradicional. Uno de los objetores fue Remigio Crespo Toral.
En agosto de 1917 se constituyó el Círculo de la Prensa, para aglutinar a quienes ejercían periodismo en Cuenca. Lo integraron José María Astudillo Regalado, Juventino Vélez, Francisco Tálbot, Rafael Florencio Arízaga, Miguel Cordero Dávila, Andrés F. Córdova y Ricardo Darquea. Fue el primer gremio periodístico local, hasta que a mitad del siglo XX aparecieran núcleos de la Unión Nacional de Periodistas (UNP) con la matriz en Quito y de la Confederación Nacional de Periodistas del Ecuador (CNPE), con sede en Guayaquil. En noviembre de 1957 se fundó la Unión de Periodistas del Azuay (UPA) y en 1979 el Colegio de Periodistas del Azuay.
El Parque Calderón, también llamado Vargas Torres, fue remodelado entre 1914 y 1917, año este último en que se lo concluyó con un enrejado. Sitio emblemático de la ciudad, en cuya historia están la fundación de Cuenca en 1557, las proclamas cívicas de Sucre y Bolívar el 22 de abril y el 8 de septiembre de 1822, respectivamente. En 1917 aquí fueron coronados los poetas Luis Cordero –post mortem- y Remigio Crespo.
El 30 de octubre de 1917 la Municipalidad resolvió “Perpetrar la memoria del señor Andrés Huirtado de Mendoza, noble hijo de la ciudad de Cuenca de España, colocando su retrato en la sala de sesiones de este Municipio”. También, “designar la plaza que ocupa la parte oriental de esta ciudad junto al templo de San Blas de HURTADO DE MENDOZA”. Octavio Díaz, al cumplir el mandato, señaló: “Ahí tenéis, señores, el retrato del fundador de esta noble tierra. Bien está conservarlo en esta casa del pueblo, para que recordemos la realeza de nuestro origen y que nuestra cuna fue acariciada por las virtudes castellanas, representadas por el preclaro Marqués de Cañete”. ¿En dónde estará el retrato hoy?
En noviembre de 1918 la Municipalidad llamó una licitación para arborizar la avenida Solano. Francisco Tálbot, Nicolás Sojos y Andrés F. Córdova presentaron propuestas, de las que fue escogida la de este último, que se comprometió previamente a nivelar la calzada. “Ojalá en tan clásica fecha del Centenario, podamos pesentar las alamedas Diez de Agosto y Solano, siquiera en la forma que lo permitan las circunstancias económicas del Concejo”, consta en la edición Nro. 8 de la revista Tres de Noviembre, publicación municipal que nació en julio de 1917.
En las fotos el puente Juana de Arco, que fué remplazado por el de El Centenario, con uno nuevo en homenaje al primer siglo de independencia. En la de esta página se aprecia la via por la que se abrió la Avenida Solano.