Una información de última hora señala que el antiguo inmueble del Hospital del Seguro, en la avenida Huayna Cápac, de Cuenca, irá a la venta en el sector privado. También, que se construirá una nueva casa de salud por 12 millones de dólares
Un avión de fabricación canadiense con el logo de la compañía Austro Aéreo, está pudriéndose a un costado de la pista del aeropuerto de Cuenca, desde finales de 2003: “Este avión se encuentra secuestrado por el IESS por disposición del Juez de Coactivas”, dice un rótulo verde, con letras blancas, que sella la puerta del aparato.
Los funcionarios del aeropuerto Mariscal La Mar, así como los usuarios del transporte aéreo se han acostumbrado a ver a la aeronave que sólo llama la atención de quienes la miran por primera vez: ¿Un avión convertido en chatarra expuesto a la admiración del público? ¡Increíble!
Y la gente se ha acostumbrado también a ver sin que llamara la atención, el edificio ruinoso del antiguo hospital del IESS –Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social- en la avenida Huayna Cápac de la ciudad de Cuenca: el edificio está abandonado desde el año 2000, cuando los servicios hospitalarios pasaron a su nuevo local, en Monay, al oriente de la ciudad.
Este medio de comunicación ha tratado de obtener información concreta sobre estos casos, pero no ha podido acceder a fuentes oficiales, apreciándose cierto sigilo para divulgar detalles. La compañía Austro Aéreo fue iniciativa de cuencanos que trataron de brindar un servicio que supliera las deficiencias de otras empresas, especialmente en itinerarios. La aventura fue un mal negocio.
Según una información en inglés, localizada en una página web de aeronáutica, en 2003 una autoridad judicial había dispuesto la liquidación de la compañía, cuyas deudas eran del orden de tres millones de dólares, por arrendamiento de aeronaves, impuestos y obligaciones patronales con el Seguro Social. No había prosperado el intento de 60 de 107 empleados por apropiarse del aparato.
Decretada la liquidación, un Juez de Coactivas decretó el secuestro de la nave que permanece hasta ahora en el aeropuerto y pertenecía a la compañía Austro Aéreo, mientras otras dos, arrendadas, se liberaron de problemas. Los conflictos laborales habrían sido resueltos, pero no los aportes al IESS, a cuya orden está la nave embargada.
¿Hasta cuándo permanecerá el avión arrumado en un espacio del aeropuerto cuencano? Es difícil obtener información sobre el futuro del aparato: por dos veces se ha llamado a remate, como chatarra, pero los interesados han ido y no han hecho propuestas. Al parecer el aluminio extremadamente duro no es susceptible de un uso artesanal, al menos en Cuenca, pero de haber posibilidades de aprovecharse en otra parte, el costo de desarmar las estructuras y del transporte no justificaría el costo.
Por añadidura, la Corporación Aeroportuaria, tampoco cobra valores por la ocupación del espacio, pues no tienen a quién reclamarlos, ya que quienes eran dueños del avión estarían viviendo fuera del Ecuador. Quizá a quién pueda reclamarse sería al IESS, cuyos dineros son de los afiliados…
El Hospital del IESS pasó en noviembre de 2000 a su local de Monay. Desde entonces está abandonado el viejo edificio, que sirvió desde 1957. Varios proyectos para reutilizarlo, han ido descartándose uno tras otro. Un tramo está ocupado por la Asociación de Jubilados del Azuay, que ha instalado algunos talleres y dispone de espacios para reuniones.
En la administración del Alcalde Fernando Cordero, el edificio fue declarado de utilidad pública, para emprender en él obras de interés para la ciudad. Pero la acción no surtió efecto, pues el IESS la objetó con argumentos de legalidad, aduciendo que un bien público no puede declararse de utilidad pública.
En meses recientes, una firma contratista ha realizado trabajos en una parte interna de la edificación, pero hay de por medio un conflicto legal, pues no se conocen detalles claros sobre la contratación, ya que las oficinas de la jurisdicción del IESS en Cuenca no habrían hecho egreso alguno por tales trabajos, que serían por más de 200 mil dólares. ¿Quién contrató y con quién? La Contraloría ha emitido un informe borrador, cuya aprobación demora en producirse y hacerse pública.
Los temas del avión y del antiguo hospital del IESS son motivo de preocupación ciudadana, pero sobre todo, temas de connotación negativa que afectan a la imagen de la Institución y perjudican a los afiliados, quienes no olvidan que en abril de 2010 de las cajas de seguridad del Monte de Piedad, manejado por el IESS, se robaron dos quintales y medio de joyas de oro de más de seis mil depositantes, sin que hasta ahora se haya dado con los autores del hecho, perpetrado con taladros eléctricos y máquinas soldadoras para romper las seguridades metálicas.
Los perjudicados recuperaron parcialmente valores de sus depósitos y sufrieron traumas sicológicos quizá más duros que los producidos por el feriado bancario del año 2000.
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Lo de última hora
Una información reciente del Presidente del Consejo Directivo del IESS, Richard Espinoza, da cuenta de que el edificio del antiguo hospital en la Huayna Cápac saldrá a la venta mediante un proceso por el que pasará a propiedad del sector privado.
Esto pondría fin a la incertidumbre desde el año 2000 sobre la suerte de este bien del IESS. Según la misma información, el Instituto tiene además en proyecto construir un centro de salud tipo C en Monay, al oriente de Cuenca, que costará 12 millones de dólares y “busca dar una mayor y mejor atención a los afiliados, jubilados y beneficiarios de la Seguridad Social; el IESS contribuye al fortalecimiento del sistema integral de salud en la provincia del Azuay y en el país, al ejecutar modelos de atención integral con estándares de eficiencia, calidad y calidez”, según la fuente.
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