La corta campaña electoral por las dignidades seccionales del país obliga a los partidos y movimientos a aprovechar al máximo el tiempo para promover a sus candidatos. Es saludable que así sea, para evitar las cansinas temporadas que hacían del evento cívico un hostigoso motivo de prolongado fastidio público.
La Unión de Periodistas del Azuay (UPA) ha retomado su antigua tradición de organizar un diálogo cordial y civilizado entre los candidatos a la Alcaldía de Cuenca y a la Prefectura del Azuay. La iniciativa es saludable y amerita la respuesta igualmente cordial y civilizada de quienes aspiran el voto popular, así como de los partidarios asistentes a tan importantes actos en este mes.
Cuando se pregona cultura democrática y madurez política, así como la necesidad del diálogo para el entendimiento entre los líderes sociales que piensan en función del bien colectivo, actos como los mencionados son tribunas para que los aspirantes al gobierno local y provincial exhiban a la faz pública no sólo sus planes de trabajo, sino además su conducta, su responsabilidad y capacidad de enfrentarse en un marco de cordura en la contraposición de ideas, de respeto y tolerancia al pensamiento ajeno. Bien por la entidad promotora de los diálogos y, sobre todo, bien por los candidatos que al acoger la invitación demostrarán merecer la elevada función que aspiran, con vocación de servicio y patriotismo.