Dos décadas de reclamos y espera transcurrieron para que se haga realidad la obra indispensable para el Proyecto Paute, que debió operar desde febrero de 1991, según los diseños originales

Inauguración de la presa con la asistencia de los presidentes de la República y de la Asamblea Legislativa, Ministros, autoridades del Austro y de CELEC Hidropaute, en el marco de la majestuosa obra de importancia nacional.

El Ecuador cerró el año 2010 con una buena noticia: la inauguración de la presa de Mazar el 29 de diciembre, que culmina una etapa importante en el aprovechamiento de las potencialidades energéticas del río Paute.

El Presidente Rafael Correa Delgado, con autoridades del sector energético, autoridades del Azuay y del Austro, presidió la ceremonia la tarde del miércoles 29 de diciembre en el sitio de unión de los ríos Paute y Mazar, donde se levanta la estructura de 5.1 millones de metros cúbicos de roca, 166 metros de alto, 330 de largo de coronación y 800 de ancho, entre las montañas.

La majestuosa obra, que embalsa 410 millones metros cúbicos de agua, formando un lago de 31 kilómetros de largo, permite regular el caudal de acceso a la Central Molino en operación desde 1983 y próximamente a las centrales Sopladora y Cardenillo que aprovecharán, en cascada, las potencialidades del río Paute.

Mazar fue concebida en los diseños iniciales del Proyecto Paute hace cerca de medio siglo, como obra indispensable para asegurar la vida útil de la central, regular los caudales y retener dos millones de metros cúbicos anuales de sedimento. Debió operar desde febrero de 1991, pero los gobiernos la pospusieron y la Central Paute, sin ella, ha soportado situaciones emergentes en tiempos de verano. En adelante ya no habrá riesgos de racionamiento eléctrico en el país, con la obra de Mazar en pleno funcionamiento: además, aporta 160 megawatios al sistema nacional interconectado.
La obra construyó el Consorcio Impregilo-Herdoíza Crespo por 400 millones de dólares. El Gobierno del Presidente Correa tiene el mérito de haberla hecho realidad y correspondió a Esteban Albornoz Vintimilla, ser actor importante en la ejecución, como Gerente de Hidropaute, Ministro de Electricidad, Gerente de la Corporación Eléctrica del Ecuador y Presidente Ejecutivo de CELEC Hidropaute, durante los trabajos que llegaron a su conclusión