Fracasan intentos de desestabilizar al gobierno de Noboa. Correísmo no ha podido censurar a la Canciller ni a la ministra del Interior, como tampoco a la Fiscal General, mientras se afianzan argumentos de que Jorge Glas no es perseguido político sino reo de la justicia.
La ministra del Interior, Mónica Palencia, se defendió con serenidad y aplomo frente a la virulenta intervención de los interpelantes (FOTO: NOTIMUNDO)
La campaña oficialmente será del 5 de enero al 6 de febrero de 2025, pero en forma anticipada los candidatos realizan proselitismo de diversas maneras, como es costumbre, lo que pasa por alto la autoridad electoral, como ha ocurrido en elecciones pasadas.
También es parte de la campaña electoral la forzada actuación fiscalizadora de la asamblea nacional, en el caso de la ministra del Interior, Mónica Palencia, cuya destitución estaba en las metas de los partidos Socialcristiano y Revolución Ciudadana, que han acabado por concertar en la oposición al gobierno, que tiene como candidato al presidente Daniel Noboa para las elecciones del próximo año.
Correa, Glas y Pólit, controvertidos personajes en el trasfondo de la crisis política y corrupción vigentes en el Ecuador
Revolución Ciudadana fracasó en este intento, pese al apoyo del PSC, pues los asambleístas de su tienda política, empeñados en censurarla, alcanzaron 77 de los 92 votos que requerían para su cometido. Al fin del fallido juicio político contra la ministra quedó la sensación de que el correísmo ha perdido una batalla más dentro de la asamblea.
La condena al ex contralor Carlos Pólit por corrupción, en los Estados Unidos, contralor de la década del gobierno de Correa, más la decisión de ese país de declararles no elegibles para las visas de ingreso a Rafael Correa y a Jorge Glas, golpean fuerte a esos personajes de la política ecuatoriana que tienen sanciones ejecutoriadas por corrupción y no podrían considerarse “perseguidos políticos” de las autoridades estadounidenses.
La decisión de la asamblea de no censurar a la ministra del Interior, acusada de incumplimiento de funciones porque no se ha extinguido la inseguridad en el país, es una resolución de peso político más que a favor del gobierno, en contra de los partidos involucrados en el intento de lograr su destitución. Al finalizar la sesión la presidenta Viviana Veloz la clausuró, dejando la posibilidad de una reconsideración en la primera sesión próxima. Una maniobra de las acostumbradas.
Pasado el fallido intento de destituir a la ministra Palencia, lo que se viene es el camino abierto a las elecciones de febrero de 2025, con un cargamento de candidatos presidenciales y asambleístas que serán protagonistas del ajetreo por captar votos. El ambiente político aparece algo opacado por la ola de violencia criminal que no cesa, con asesinatos todos los días, especialmente en provincias de la costa y en Guayaquil. Las noticias de estos hechos se han ido tornando habituales, son información común de todos los días.
La Vicepresidenta Verónica Abad ¿asumirá la presidencia? |
El número de asambleístas por elegirse ha crecido de 137 en la actualidad a 151 para el nuevo período, en base al incremento poblacional. Azuay en vez de cinco elegirá seis legisladores.
Un punto aún no definido es el de la vice presidenta Verónica Abad, a quien constitucionalmente corresponde asumir la presidencia cuando el mandatario entre a campaña electoral el 6 de enero. El presidente Noboa la alejó del país, desde inicios del mandato, nombrándola embajadora de paz en Israel y luego, ante riesgos de su seguridad, la mandó a Turquía. En la práctica, no tiene funciones, y la única a la que tendría derecho constitucional, sería remplazar al presidente, quien hace lo posible por evitarlo.
Las elecciones serán el 9 de febrero de 2025. Si hay segunda vuelta presidencial, se volvería a las urnas el 13 de abril, luego de un debate entre los finalistas el 6 de ese mes. Los calendarios electorales resultan ser rutina en la vida cotidiana de los ecuatorianos.ecuatorianos.