El Presidente ecuatoriano anuncia un próximo viaje a Washington para gestionar vacunas contra el Covid. ¿Habrá renunciado su embajadora Ivonne Baki, tan diligente y tan amiga del Presidente Trump?

Las malas bocas y cabezas mal pensadas sospechan que el saliente mandatario estaría buscando un alto cargo internacional con sede en aquellos lares. A fin de cuentas, poco falta para quedarse en desempleo.

Si tuviera éxito la gestión de vacunas, sería otro éxito que el 7 de febrero en los recintos electorales funcionaran puestos de inoculación para en un día inmunizar a millones de ecuatorianos. Después de la cola para dar el voto, otra cola para el pinchazo!

Además, la saludable iniciativa sería un atractivo cívico para animar al sufragio a tantos indecisos, temerosos o frustrados ciudadanos obligados a ir a las urnas para esquivar las sanciones.

Coronavirus… maldito coronavirus. Ahora tiene cepas variantes que desconciertan a los científicos. Se parece a las cepas variantes de la corrupción ecuatoriana: acaban de descubrir el desvío de cinco millones de dólares de bonos solidarios a cuentas de diestros negociantes de la miseria humana. Bromita más cruel, pero verdadera…

Los autores del robo millonario, ¿no estarán de candidatos impunes ante la Justicia?

Coronavirus… maldito coronavirus. Por su culpa los cuencanos se privaron del festejo de los años viejos, de las bromas e inocentadas, de los disfraces tradicionales. Aunque todos andamos disfrazados con las mascarillas ya casi un año.