El 100% de la población urbana tiene agua potable. Las telecomunicaciones lideran en el país la tecnología de conexión al mundo. Salud, saneamiento y gestión ambiental sustentan la calidad de los servicios públicos

Al cumplir 188 años de independencia, Cuenca es una ciudad con mayoría de edad. La calidad de los servicios básicos marca la satisfacción de los habitantes de una ciudad donde, además, es posible gozar del encanto urbano y del paisaje.

El éxito en la calidad y cobertura de agua potable, alcantarillado, telecomunicaciones y saneamiento, tiene una explicación: el respeto a la planificación. Los cambios directivos propios de las sucesiones democráticas, no han alterado las políticas de gestión ni de las responsabilidades municipales.

Ese es el criterio de Jorge Espinoza, desde hace cuatro años Director Administrativo de la Empresa ETAPA, encargada de dotar de servicios básicos a los 480 mil habitantes urbanos y rurales del cantón. Creada en 1968, con 40 años de experiencia humana y desarrollo técnico, es pionera en su ramo en el país y una de las más representativas de América Latina. La afirmación, lejos de un concepto propagandístico, es realidad que vale resaltarse como uno de los méritos de la ciudad, en el mes de su conmemoración cívica.

Jorge Espinoza, Gerente de Planificación de ETAPA.

ETAPA estuvo antecedida por la Empresa de Luz, Agua y Teléfonos (EMLAT), creada en 1954 por el Alcalde Miguel Ángel Estrella Arévalo, para que una entidad especializada satisficiera las necesidades cotidianas de la ciudad y sus habitantes. Un acierto visionario del personero municipal, que abrió el camino a seguir sin tropiezos.

"Ahora la telefonía quedó en el pasado. Hablamos de telecomunicaciones", dice el ingeniero Espinoza. En 1935 operó en la ciudad una planta particular con 100 teléfonos de magneto, pero en julio de 1949 la Municipalidad inauguró la primera planta de teléfonos automáticos del Ecuador, para mil usuarios.

En la actualidad, los abonados telefónicos sobrepasan de 125 mil en el cantón, con cerca de 20 mil en el medio rural. Cuenca mantiene liderazgo en densidad telefónica, pues 24.7 de cada cien habitantes tienen el servicio, mientras la relación a nivel de país es de 13 por cada cien habitantes.

Desde hace cinco años opera la empresa Etapatelecom, filial de ETAPA, para suministrar telefonía móvil en Cuenca y en el país, así como servicios agregados de transmisión de datos a nivel mundial. Los abonados de Etapatelecom sobrepasan los tres mil, más una cifra similar de los usuarios que acceden con tarjetas. La tecnología de esta empresa es la más avanzada del país para cubrir una variada convergencia de redes y servicios.

La cobertura del agua potable es del 100% en el área urbana y del 97% en la rural. En 2004 los abonados de agua eran 63.859 y en la actualidad son 83.884.

Un referente interesante es la disminución de la cantidad de agua desperdiciada: de 3 millones de metros cúbicos hace cuatro años, disminuyó a 2.2 millones, para situarse en el promedio de 30%, que contrasta con el 65% del desperdicio a nivel nacional y de América Latina. Se ha llegado a un punto de equilibrio, pues no convienen inversiones para reducir más el agua desperdiciada, en función del costo-beneficio.

El Gerente de Etapa, Santiago López, y el Alcalde Marcelo Cabrera en una visita a las obras de la empresa.

La empresa ejecuta, desde el año pasado, la segunda fase de los Planes Maestros de Agua Potable y Alcantarillado de Cuenca, con la inversión de 93 millones de dólares, los 62 crédito del BID con el interés del 3% como un premio por los resultados logrados por ETAPA. La meta es satisfacer la demanda de agua hasta el 2030, cuando la ciudad tendrá 700 mil habitantes. El plan se ejecutará en seis años.

En correlación con la ampliación del servicio de agua, se desarrollan programas de protección ambiental y mejoramiento integral de la salud. Cuenca es la única ciudad ecuatoriana que trata las aguas servidas en lagunas de oxigenación, para devolverlas purificadas al río.

El parque Nacional Cajas, administrado por ETAPA, es un modelo de reserva ecológica: son más de 200 lagunas que acumulan 53 millones de metros cúbicos de agua, fuente de vida para la ciudad, en un humedal de importancia internacional reconocido por RAMSAR y que ha recibido el primer premio en gestión ambiental municipal del Ecuador.

La preservación de la zona se complementa con planes de educación ambiental, que involucran a los turistas, así como a estudiantes y a los vecinos de ésta y otras zonas protegidas, que reciben instrucciones y se fomenta a través suyo, planes de viveros y sembríos forestales.

Adicionalmente, se ha adquirido 10.700 hectáreas de terrenos de interés ambiental, para programas de preservación, en Mazán, Surocucho, Hato Chocar, Llulluchas, Chanlud y Can Can.

El programa de recolección de aceites y pilas tiene un interés especial, para evitar la contaminación de las aguas y el suelo. En 2007 se recogió 692 mil galones de aceite usado, a través de 650 establecimientos escogidos para el efecto. La cifra equivale a la captación del 54.7% del aceite usado, que contrasta con el 46% que se registra en Alemania, mientras en América Latina no hay programas de esta orientación.

Para recolectar las pilas se promueve concursos con los estudiantes. Desde que se inició el programa en 2005 se han recolectado 120 mil unidades que han ido a Ucubamba, donde se ha erigido una estructura arquitectónica junto a las lagunas de oxigenación, con el material constituido en un monumento de atracción estética. Junto al relleno sanitario de Pichilcay, una estructura similar se ha levantado con 400 mil pilas.

La gestión de la empresa ETAPA está seguida por una evaluación que involucra lo financiero y el cumplimiento de los planes estratégicos, así como la gestión del personal, al que se ha involucrado en las decisiones instituciones con capacitación, estímulos y reconocimientos.

La empresa cuenta con mil empleados, a los que se suman más de 3.600 personas que tienen ocupación indirecta, debiéndose destacar el trabajo coordinado con las 21 juntas parroquiales del cantón, así como la permanente presencia del personal en programas educativos, de liderazgo y de inducción institucional, esto es recorridos para que el personal se entere de cómo funcionan y qué hacen otras áreas de su propia empresa.

ETAPA se ha perfeccionado, desarrollado y crecido en cuatro décadas, tiene un presupuesto de 148 millones de dólares este año, cifra que supera con 48 millones al presupuesto de la propia Municipalidad, de la que forma parte. Es una empresa emblemática por sus resultados, reconocidos a nivel nacional a internacional.

El "lado flaco" de Cuenca es el tránsito urbano, cuya responsabilidad aunque no es de ETAPA, corresponde a la Municipalidad, que no logra regularlo con una planificación adecuada en organización, dirección de rutas y semaforización. Las congestiones son un tormento público.