Entre finales de mayo y comienzos del presente mes, Cuenca es anfitriona del VI Festival Olímpico, un acontecimiento deportivo que, al tener sede en esta ciudad, ratifica las condiciones y garantías que ofrece para el éxito de este tipo de certámenes.

Al margen de las connotaciones deportivas, la cita internacional es oportunidad para reconocer la capacidad organizativa, profesional, personal inclusive, de quienes ejercen funciones directivas en el deporte azuayo: la Federación Deportiva, institución que con 84 años de labor ininterrumpida y ascendente, ha convertido al deporte en una de las expresiones culturales más importantes de la ciudad de Cuenca, con honores nacionales e internacionales dignos de los mayores aplausos.

Cuando la política, la gobernabilidad, la administración pública y hasta las instituciones de mayor confiabilidad social €“fuerzas armadas, iglesia, congreso y afines, gremios laborales, periodísticos, etc.- han caído en depresión, la juventud practicante del deporte, bajo la guía de instituciones ajenas a los avatares de la política, da ejemplos de juego limpio, de entrega con alma y vida a sus causas, reactiva la fe en el futuro, ante la esperanza de que esas energías, disciplina y honestidad al competir, se aplicaran en las prácticas públicas y privadas en el futuro.

El deporte €“ el deporte por el deporte, al margen de las implicaciones comerciales de los consabidos espectáculos masivos- ha dado glorias y alegrías a Cuenca y al Ecuador. Por demás está insistir en nombres de personajes que son orgullo de esta ciudad y del país, pero sí vale recordar que sus éxitos son en gran manera, aparte de su entrega vocacional y perseverancia, fruto de la gestión que cumplen los organismos locales que dirigen las diversas disciplinas.

Sin dejar de valorar lo que significa Cuenca en el campo de la cultura en general, hay que reconocer que el deporte es de décadas atrás, la manifestación de mayor relevancia y prestigio de esta capital provincial, otrora calificada Atenas del Ecuador y hoy, con merecimiento, llamada la Olimpia del Ecuador.