Paúl Carrasco está satisfecho con el apoyo del Gobierno a su administración y coincide ideológicamente con el Presidente Correa en los objetivos de cambio para el país
"Hemos dado un giro total a la Prefectura. Es un verdadero Gobierno Provincial, no una oficina de hacer obras por hacer obras. La planificación permite trabajar con elementos básicos para lograr los mejores resultados": así define y sintetiza su función Paúl Carrasco Carpio, ingeniero agrónomo de 37 años.
De voz enérgica, persuasivo, a momentos apasionado, el Prefecto del Azuay accedió a una entrevista con este medio para abordar temas de carácter general sobre la responsabilidad administrativa y política en que está involucrado a través del cargo que ganó por elecciones, en octubre de 2003, para asumir en enero de 2004, cuando era dirigente activo de Izquierda Democrática.
La gestión participativa, la vialidad, la educación, el desarrollo económico y el fortalecimiento institucional, son los ejes en torno a los cuales ha desarrollado su administración y los analiza uno a uno.
El enfoque de la participación es una característica del gobierno provincial: "Tenemos un sistema de planificación participativa, un presupuesto participativo y actuamos en función de las asambleas populares y un parlamento provincial, que permiten oír a la población para elaborar propuestas directamente sustentadas en las necesidades reales del Azuay".
En el tema de la vialidad destaca la satisfacción por lo realizado y la frustración por lo que no ha podido hacer. "Impusimos un concepto diferente, de largo plazo, gestionando recursos no solo para arreglar las vías, sino para asegurar un sistema vial sobre la lógica de la sustentabilidad y permanencia".
La implantación de los peajes solidario y subsidiado ha permitido crear microempresas viales de mantenimiento. "Pero también estamos frustrados porque no se nos ha entregado las vías o las competencias no han estado claras, dándose casos de cuencanos que se han opuesto a los proyectos por aspiraciones políticas", expresa. No obstante, está contento porque el gobierno está tomando el modelo azuayo para aplicarlo a nivel nacional.
En Educación, se ha reducido en 70% el déficit de infraestructura educativa en la provincia; hay un programa de tres años de capacitación al magisterio; se entrega textos escolares en forma gratuita en asocio con el Ministerio de Educación y se ha alcanzado grandes logros en la lucha contra el analfabetismo, con varios cantones libres de analfabetismo. "Al iniciar el plan de alfabetización Azuay tenía un índice del 11% de analfabetos, aunque según nuestra investigación era del 16%: ahora ha bajado al 8% y no descartamos que pronto toda la provincia esté libre de analfabetismo". En Cuenca no ha sido posible concretar una propuesta y se registra un 8% de analfabetos en la población.
El Prefecto no oculta su satisfacción por los logros en el tema educativo, pese a que hay quienes critican porque no se ven cosas nuevas, lo que se explica porque hay un plan armado en marcha y la gestión va por mantenerse en esa misma línea.En cuanto a desarrollo económico, se ha involucrado a sectores de escasos recursos en la inversión del Gobierno Provincial. "Hemos logrado la socialización de la inversión pública con nuevos criterios, como los clouster, que han permitido armar estructuras productivas locales en la educación, en proyectos lácteos como los que están funcionando en la cuenca del Jubones".
Se han constituido 20 microempresas viales, cada una con 40 personas, en su mayoría mujeres, para realizar el mantenimiento de las vías. El Gobierno provincial paga por este trabajo y cada microempresa ahorra recursos para a su vez constituir nuevas microempresas productivas de criaderos de cuyes, de truchas, de pollos, o la creación de bancos locales. El aporte público anual es de 800 mil dólares para las 20 microempresas iniciales.
El fortalecimiento institucional es visible con solo llegar al Gobierno Provincial, dice: "Es una institución de presentación limpia, moderna, dotada de sistemas informáticos, con una nueva visión de atención al público. Lamento que un sector de empleados -mínimo, por cierto- se oponga al nuevo esquema, porque no acepta que esta es una nueva institución".
Clausura de un curso para los maestros, auspiciado por el Gobierno Provincial.
El entusiasmo político
| Cuando el diálogo va por lo político, Carrasco se entusiasma. "La relación con el actual gobierno es buena, coincido con el Presidente en lo ideológico, comparto su visión social. Además, hay una gran liquidez para no hacernos faltar los desembolsos de ley y para los nuevos proyectos". |
Pero hay cosas que le preocupan: el Presidente no sabe que mantienen el enfoque centralista los mandos medios de la administración y que hasta sus coidearios, por aspiraciones políticas, se resisten a aceptar que los consejos provinciales son niveles de gobierno. "El gobierno propone la descentralización vial y a ella se opone la Subsecretaría de Obras Públicas del Azuay: respeto al titular de la entidad, pero no tiene coincidencia ideológica con el propio gobierno", expresa. También hace reparo al enfoque a la estructura macro del Estado por el gobierno, cuyas decisiones no llegan a lo micro por no contar con los gobiernos seccionales.
"Mantengo una buena relación con el Gobierno €“insiste- porque creo en la necesidad de un cambio real y los sectores tradicionales y los progresistas me dejaron solo: sentí la presión de los sectores políticos y no se me quita que en Acuerdo Progresista hay representantes de la partidocracia que actúan como los de la política antigua. Hacer cambios solo es imposible: si el gobierno tiene la convicción del cambio y en esta decisión comete errores, yo me sumo, aunque no me lo pidan. En esta perspectiva creo también en la Asamblea Constituyente y le apoyo en fortalecer las cosas que van por el cambio "
El Prefecto renunció a su partido político, la Izquierda Democrática, pero no a la política. ¿Será candidato? No confirma, tampoco lo niega: "Lo lógico es que si tenemos el apoyo de la población, que sí lo tenemos como prueba el susto de la misma oposición, es optar por la reelección, porque están generados varios procesos, propusimos la regionalización hace dos años y la Asamblea ha recogido el modelo del Azuay. Pensamos en la autonomía solidaria".
Dentro de la regionalización, destaca el logro de la mancomunidad con El Oro, aprobada por los gobiernos provinciales de las dos provincias, para formar una región equitativa y emprender metas comunes, como la concesión de la vía Cuenca-Machala o el impulso al proyecto hidroeléctrico de Minas y La Unión, cuyos estudios están contratados para generar 369 megawatios y afrontar temas del turismo, el regadío y otros: "Cuando salga la nueva Constitución vamos a dar ejemplo de lo que sería un referéndum para hacer realidad la unión de dos provincias, a las que se sumarían Cañar y Morona Santiago".
Como no tiene partido, impulsa su movimiento, nominado Encuentro Democrático, con el lema La Libertad, La Igualdad, la Solidaridad, que recoge el pensamiento del Socialismo Liberal de los teóricos italianos de los años 40 al 50 del siglo pasado, que plantean ampliar la democracia a todos los niveles, la participación de todos los sectores de la sociedad en la toma de decisiones, la igualdad de oportunidades de acceso a la educación, la salud gratuita, el empleo en los sectores productivos públicos o privados o como emprendedores, generando empresarios con autonomía administrativa y visión social".
Al fin de la entrevista, el Prefecto reconoce algunos errores cometidos: "Haberme sometido inicialmente a presiones políticas, sin entender que mi obligación era administrar para una provincia y no para el sector político al que me pertenecía; o no haber entendido la lógica de la administración pública al pensar que todo lo planteado iba a hacerse, cuando hay un complicado proceso a seguir, reglamentos y trabas que retrasan las propuestas. "Pero redireccionamos las propuestas y trabajamos para todos, independientes, con apoyo de la población para mejorar la administración y que la población se sienta atendida y contenta. Adquirimos la capacidad de tomar decisiones sin especular sobre lo que pueda pasar luego política o electoralmente. Somos un grupo de personas que toma decisiones con liderazgo".