Antonio Idrovo Astudillo, arquitecto, es uno de los cuencanos de confianza del Presidente Rafael Correa Delgado. Su amistad nació en forma imprevista en septiembre de 2005
Antonio Idrovo Astudillo, coordinador provincial de Alianza País. |
"Un amigo de Guayaquil €“comenta- me llamó a consultar mi criterio sobre Rafael y yo le respondí que nunca había estado en política y no podría opinar nada, pero a poco vino a Cuenca, con Ricardo Patiño, a proponerme que me involucrase en un movimiento en gestación para apoyar a Correa como candidato presidencial".
El argumento de que nunca había estado en política fue acogido como positivo y al fin, Correa y su amigo estaban en su casa conversando sobre el tema. Había cuatro o cinco cuencanos más, que fueron aumentando de número en encuentros posteriores hasta que creció el grupo más de lo esperado.
Idrovo es desde entonces Coordinador provincial del movimiento Alianza País y cuando Correa ha iniciado el segundo año de mandato presidencial, éste es, precisamente, el motivo para consultar su criterio sobre el primer año de gobierno.
Es todo elogios, que los matiza con algunos reparos. Logró la inclusión ciudadana €“asegura- y por primera vez el pueblo se siente parte del gobierno, en el que tiene la imagen del cambio que aspira la mayoría y aún más, siente en sí mismo un cambio. Los estudiantes, en 30 años o más, por primera vez han tomado partido para apoyar al gobierno en el que confían.
Según él, Correa ha cumplido las ofertas electorales en un mínimo de tiempo: duplicó los bonos de la dignidad, de la vivienda, aprobó los préstamos micro empresariales, entregó insumos agrícolas, creó plazas de trabajo para los maestros, atendió emergencias en la salud, empezando por el equipamiento de los hospitales públicos.
La deuda social interna se ha cumplido y la deuda externa quedó postergada, como ofreció. Ha tenido conflictos con la prensa, pero es importante que haya exigido respeto para la majestad de la Presidencia, no del Presidente como persona. Antes no se respetaba al Presidente de la República y él se ha hecho respetar: ha sido incomprendido, duro a veces, pero necesitaba recuperar el respeto a la Presidencia.
"Es un hombre fogoso, con pasión por la Patria, lo que no gusta a muchos, pero hay que considerar que el objetivo no es ofender, sino defender las causas favorables a las mayorías, en particular a los pobres", dice.
También tiene sus reparos hacia la conducta del Presidente: es poco comunicativo con los sectores políticos que le apoyan y se enteran de ciertas decisiones a través de los medios. Falta más contacto con la dirigencia y con las bases antes de decisiones importantes, como la reforma tributaria, que no fue socializada.
"Creo que en el futuro debe ser más tolerante con la gente propia y la de fuera y recibir el consejo de los sectores que le apoyamos: hubiéramos querido pedirle, por ejemplo, que moderase su posición frente a la prensa, que termine, que no pelee más "
Pero lo que importa son los resultados. En el caso del Azuay y del Austro Idrovo asegura que el gobierno ha cumplido las ofertas, como en el tema vial: dijo que esta región tendrá las mejores vías del país y hacia allá vamos, con la carretera Salado-Léntag en pleno avance; la Cuenca-Loja está contratada en la mayor parte y con hormigón rígido para durar más de 20 años; avanza la Chicty-Sevilla de Oro, como la obra de Mazar. Y ha permitido que el Consejo Provincial pueda desarrollar los planes de vialidad interna.
El Presidente ha llevado adelante la Revolución Ciudadana, principal eje de sus propuestas. Primero la consulta, luego la Asamblea Constituyente para construir la nueva Constitución, son ofertas cumplidas para el ordenamiento político y legal del país en los próximos 20 años o más. Se eliminó la partidocracia, la noche neoliberal y sus privilegios económicos ya no existen, hay una nueva cultura tributaria y la corrupción ha disminuido.
"La oposición se ha identificado en uno de sus representantes, Nebot, que está capitalizando sus fuerzas. Esto evidencia el resentimiento de los sectores que por 30 años mangonearon de los negocios petroleros, de las telecomunicaciones, de las empresas eléctricas".
En cuando a la Asamblea Constituyente, Idrovo considera que hay acercamiento entre el Gobierno y la Asamblea, porque las dos fuerzas son parte de la Revolución Ciudadana y tienen el apoyo del pueblo que se siente partícipe de la Asamblea y coincide con sus objetivos. Además, a la mayoría de asambleístas afines a la tesis gubernamental, se asocian independientes abiertamente en contraposición a los sectores de derecha representados en la minoría.
El dirigente correísta opina también sobre la presencia gubernamental en Azuay: el Gobernador Oswaldo Larriva ha tenido una gestión muy entregada, decidida, para cumplir los compromisos del gobierno con la provincia. Ha estado en todos los espacios de conflicto, afrontándolos y socializando temas conflictivos como la minería. Quizá un reparo: faltó coordinación con los movimientos de apoyo al gobierno, lo que sería comprensible tomando en cuenta su presencia permanente en cantones, parroquias y sitios apartados, para conocer y tratar los temas de interés gubernamental y de las propias comunidades, precautelando conflictos y resolviéndolos en lo posible antes de que ocurrieran.
Antonio Idrovo se confiesa satisfecho por haber logrado estructurar el movimiento en todo el Azuay, con directivas en cantones y parroquias, frente de comunidades que apoyan la gobernabilidad. "Ha sido un buen ejercicio de liderazgo €“afirma- ", para terminar expresando que si bien hasta ahora no ha sido partícipe de ninguna función, está dispuesto a ejercer en el futuro un cargo administrativo. Gente cercana al Presidente ha propuesto su nombre para el anunciado Ministerio Regional del Austro.
El papel de la Gobernación
Oswaldo Larriva ha logrado una imagen de apertura democrática en la Gobernación, siempre acompañado de su asistente policial, David Morales. |
Oswaldo Larriva Alvarado inició el segundo año al frente de la Gobernación del Azuay. Prudente, democrático, conciliador, ha sido de los pocos representantes del Ejecutivo que ha sobrepasado el año de gestión en la dependencia pública azuaya tradicionalmente inestable.
Además, su presencia ha sido cotidiana para encarar las situaciones vinculadas a la representación del Gobierno, haciendo de la Gobernación una oficina activa, sin descuidar la preocupación por los cantones y parroquias de la provincia, a las que ha concurrido constantemente. Hasta la imagen física de la entidad ha elevado de nivel con la reestructuración y mejoras en los espacios del edificio sombrío que fue, al emblemático y acogedor de ahora.
Los logros alcanzados en temas de vialidad, salud, educación, la coordinación interinstitucional, la respetabilidad de la Gobernación, son fruto de dedicación a tiempo completo al cumplimiento de las responsabilidades asumidas con voluntad de trabajar con la voluntad y los ojos puestos en el servicio al público.
La mejor imagen de su gestión ha sido la que han presentado los medios de comunicación, cuyos representantes han tenido las puertas siempre abiertas para abordar a la primera autoridad del Ejecutivo en el Azuay.