A trasluz del festejo del Colegio Técnico Salesiano está la imagen del sacerdote italiano
Carlos Crespi, cuya inteligencia visionaria sigue presente en el papel de su comunidad
por la educación de Cuenca y del país.
Desde los primeros egresados en 1941, hasta los de 2007, recorrieron Cuenca el 12 de enero en un vistoso acto conmemorativo de los 70 años del Plantel, entre aplausos del público aglomerado en los costados de las calles o en los balcones de los edificios del centro histórico. Un día inolvidable para los jóvenes de ayer, ahora maduros y viejos, y los de hoy, con el futuro entero por delante.
Carlos Crespi, nacido en 1891 y muerto en Cuenca en 1982 €“ahora camino a los altares para ser santo- lo fundó el 10 de enero de 1938 dentro de un proceso concebido con planes proféticos desde que llegó al Ecuador en 1923 y a Cuenca en 1926.
En 1927 creó el Colegio Agronómico Salesiano y la Escuela de Artes y Oficios. En 1936 la escuela Cornelio Merchán, con su gran edificio en el barrio María Auxiliadora, en terrenos donados por el filántropo que sería patrono del Plantel hasta cuando en 1967 se cambió su nombre por el de Carlos Crespi. No fue, por supuesto, el padre Crespi autor del cambio, pues lo que menos demostró en su vida el humilde sacerdote fue afanes figurativos.
Dinámico, visionario, infatigable, en 1937 viajó a Italia a traer técnicos y maquinarias para abrir al año siguiente el Colegio Técnico Salesiano con áreas de carpintería, mecánica, sastrería, zapatería, tipografía, encuadernación y técnicas agropecuarias. Planificó un plantel ajustado al desarrollo de una ciudad encaminada hacia los campos técnicos y de la industria. Más aún, un plantel que abriera caminos nuevos para la juventud a través de esas áreas.
De allí salió gente capacitada para trabajar de inmediato, cuyas habilidades empezaron a reflejarse en todos los ámbitos de la vida diaria. Hasta 1957 los egresados no obtenían el bachillerato, pues cursaban tres y cuatro años antes de egresar y quienes interesaban el título completaban los estudios en el normal Manuel J. Calle.
El prestigio del plantel fue en ascenso y el local resulta ba estrecho. El padre Crespi construyó el edificio apropiado en el barrio El Vecino y lo inauguró en 1967. Seis años después el Ministerio de Educación lo convierte en colegio fiscomisional, empieza a llamarse Instituto Tecnológico Salesiano y desde 1977 los jóvenes salen con el título de técnicos industriales.
Es interesante que el padre Crespi, cada vez que funda un plantel educativo, deja su administración y responsabilidades en manos de otros salesianos. Nunca figura él como director o rector. Su papel es otro: promover la obra salesiana, fiel a los postulados de Juan Bosco, creador de la comunidad, hace mucho proclamado santo.
Desde 1989, mediante un convenio con la Universidad, los jóvenes egresan con el título de Tecnólogos Industriales y se dan pasos a la creación de la Universidad Tecnológica Salesiana, que actualmente ocupa el local del Técnico en El Vecino, mientras el Colegio Técnico pasó al edificio del Agronómico Salesiano, en la avenida Don Bosco, Agronómico que se transformó en Facultad de Agronomía y ahora funciona en el cantón Paute.
La visión integral en el campo educativo, concebida por Carlos Crespi, funciona a la perfección, expandiendo su gestión y actualizándola en función del desarrollo de la ciudad y del país. Una sede de la Universidad Salesiana está en Quito.
Los grandes edificios de los planteles salesianos, concebidos y construidos por el padre Crespi, ocupan grandes superficies fuera del centro de la ciudad €“excepto la primera obra, el Instituto Cornelio Merchán-, lo que revela la inversión de grandes recursos económicos que se las daba modos para obtener el genial sacerdote que pensaba más que en el presente, en el futuro. ¿De dónde obtenía el dinero? He ahí uno de sus milagros.
La pequeña imprenta que instaló en la Escuela de Artes y Oficios gradualmente fue creciendo y modernizándose, para convertirse en la editorial LNS y más tarde en la Editorial Don Bosco, dotada con la tecnología más avanzada, hoy una de las grandes casas editoriales de América Latina.
Actualmente el Colegio Técnico Salesiano ofrece estudios en las áreas de Electricidad, Mecánica y Construcciones Metálicas, Electromecánica Automotriz, Aplicaciones Informáticas y Mecatrónica.
Con más de 1 700 alumnos, tiene 180 profesores, está provisto de laboratorios, equipamiento y tecnología de punta y su prestigio es reconocido en el país y el exterior. Es frecuente ver avisos en los diarios, de empresas de Guayaquil o Quito que buscan personal graduado en el Técnico Salesiano de Cuenca, colegio que en 2007 recibió el Premio Iberoamericano en Honor a la Calidad de la Educación.
El plantel tiene como rector a César Vanegas, quien, conjuntamente con Javier Coronel Gutiérrez, responsable de comunicación social, fueron fuente para completar el tratamiento del tema periodístico sobre la trayectoria del establecimiento.