Propuestas, críticas y autocríticas son el fruto de reflexiones al interior del Consejo Universitario, expuestas a la Asamblea Nacional
La Universidad no puede ser únicamente un lugar de trabajo o un proceso simple para adquirir un título profesional. Es y será un ámbito especial para el desarrollo de la ciencia y la tecnología y para la realización humana e intelectual integral de todos", dice la Universidad de Cuenca al presentar una propuesta a la Asamblea Nacional, sobre la nueva Ley Orgánica de Educación Superior.
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Marco Valencia y Fabián Carrasco, Vicerrector y Rector encargados de la Universidad de Cuenca, hicieron declaraciones para esta revista. |
El documento, suscrito por el Rector Jaime Astudillo y el Vicerrector Fabián Carrasco, resume las aspiraciones sobre la autonomía universitaria, la relación con el Estado, la situación académica, económica y la relación con la sociedad: "Gran parte de las debilidades de nuestra educación superior tiene origen en una reiterada relación conflictiva entre el Estado y la Universidad, la ausencia de políticas públicas que reconozcan la trascendencia del mundo universitario en la sociedad y la consoliden con recursos y procesos pertinentes; y, desde luego, una limitada capacidad innovadora de las propias universidades para superar este contexto adverso", señalan.
El Vicerrector Fabián Carrasco, encargado del Rectorado en la segunda quincena de septiembre por ausencia del titular, junto con el Decano de Economía, Marco Valencia, encargado del Vicerrectorado, expusieron a AVANCE una síntesis de la propuesta a la Asamblea Nacional.
El punto primordial es que el Secretario Técnico del Consejo de Educación Superior no sea escogido por el Presidente de la República, como lo plantea la SENPLADES. " ¿Qué podría pasar con la Universidad €“dice Carrasco- si en vez de estar Rafael Correa en la Presidencia, lo estuvieran en el futuro personas al estilo de Lucio Gutiérrez o Abdalá Bucaram?"
La SENPLADES integra el Consejo con 10 miembros, ninguno vinculado con las universidades. La Universidad de Cuenca propone que sean 15: "Cinco Ministros, cinco PhD elegidos por concurso público de merecimientos y oposición y cinco representantes de las instituciones del sistema de educación superior (dos rectores por las universidades públicas, un rector por las escuelas politécnicas públicas; un rector por las universidades y politécnicas particulares y, un rector por los institutos superiores técnicos, tecnológicos y pedagógicos, conservatorios de música y artes)". Este Consejo elegiría al Secretario Técnico.
La Universidad de Cuenca está de acuerdo con el proyecto de la SENPLADES en cuanto a la evaluación, que debe realizarse en forma permanente, con personas ajenas a la Universidad. "No ha habido un control académico de las carreras universitarias y han proliferado centros de educación superior, como ahora los postgrados que, mientras más fáciles y más cortos, más cuestan", opina Carrasco.
"Las Universidades no podemos ser juez y parte en el órgano de acreditación y aseguramiento de la calidad, que es ante todo fiscalizador y de control, pero si reclamamos que en el órgano destinado a planificar y decidir las políticas académicas e institucionales la representación de la universidad ecuatoriana esté presente", dice el documento de la universidad cuencana.
La Universidad concuerda con la disposición que exige que las universidades que puedan hacerlo sean generadoras de pensamiento y no sean solo difusoras, pero no con que deban existir universidades únicamente dedicadas a la investigación o la educación continua; además concuerda con la noción de autonomía responsable que garantice la libertad para regular la vida académica e institucional de las universidades, libertad sujeta a evaluación, rendición de cuentas y acreditación.
También considera debe darse un incremento paulatino de los requisitos académicos para ejercer funciones: "Es necesario revisar cuan aplicable es el requisito obligatorio de PhD para todos los profesores universitarios e incluso de este mismo requisito para Rector, en el escaso plazo de cinco años".
Los señalados serían los aportes más importantes de la Universidad de Cuenca al proyecto de Ley de Educación Superior. Otros tienen que ver con procesos normales de la vida institucional, como la constancia expresa de entregar a las universidades las compensaciones por la gratuidad de la enseñanza y la eliminación de las donaciones del impuesto a la renta.
Un buen Presidente, pero... |
El diálogo con las autoridades universitarias fue oportunidad para abordar otros temas relacionados con la vida nacional y de la propia universidad. "Considero que Rafael Correa es un buen Presidente, ha hecho cambios esperados, pero tiene también cosas malas: un exceso de poder que originó las protestas, levantamientos y el paro del magisterio. No es correcto que piense que solo él puede resolverlo todo", opina Fabián Carrasco. Marco Valencia, Decano de Economía, dice que la esperanza de quienes apoyaron a Correa en su proyecto político, ha ido desvaneciéndose por cambios de perspectiva en la realidad, que le han llevado a acrecentar el poder y centralizar todo en sus decisiones, sin que valga la opinión ajena. "No sería conveniente ni quisiéramos que ocurriera, el cambio del Presidente, pero sí es de esperar que haya en él cambios que permitan restablecer la confianza inicial para mejorar la realidad del país", dice. El Rector encargado se refiere a la violencia de las marchas estudiantiles y el refugio de los actores en los predios universitarios: "La Universidad es agredida por jóvenes de colegios y hasta niños de escuela y también por la Policía que los persigue. Hay que buscar medidas para impedir que continúen estos hechos y si la policía planifica operativos adecuados se evitaría que la avenida junto a la Universidad sea un campo de batalla", dice. Los jóvenes universitarios no participan en las manifestaciones violentas, con excepción de algunos directivos de la Federación de Estudiantes que, por razones políticas, estimulan a los colegiales para mantener la zozobra. En la tercera semana de septiembre, debieron suspenderse las labores en la Universidad por la contaminación de gases al interior de los predios. Carrasco y Valencia coinciden en que, según la ley vigente, no está permitido que la fuerza pública ingrese a los predios universitarios para detener a quienes cometan infracciones y ni siquiera a los delincuentes. Mientras así esté legislado, se hará respetar la inviolabilidad de la Universidad, aunque valdría revisar para el futuro la conveniencia de un control que impida que, en cualquier momento, ocurrieran hechos lamentables en laboratorios, aulas y bienes por la facilidad e impunidad con la que acceden personas extrañas a la vida universitaria. |